El aplauso cerrado de todos los presentes en una sala Villena abarrotada, recibió a Omara Portuondo y a Chucho Valdés al arribo de éstos a la ceremonia donde les fue entregada la Condición de Miembro Emérito de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba.
El maestro Guido López Gavilán, presidente de la Asociación de Música de la institución, dio la bienvenida a los asistentes a este acto solemne y explicó que se entregaría a ambos artistas además la Medalla 50 Aniversario, instituida para rendir merecido reconocimiento a los miembros fundadores de la organización que se han mantenido toda su vida con una actitud destacada en la formación del más valioso arte cubano.
“Creo que no hace falta, nadie me perdonaría que yo me pusiera a hablar acerca de la obra y de los méritos, lo que todo el mundo conoce, de Omara y Chucho, solamente quiero decirles que los premios mayores, que se pueden otorgar a los seres humanos, a los artistas, ellos los tienen, y ese máximo reconocimiento, es el cariño y el máximo galardón es la admiración que el pueblo cubano, no solo los músicos y los artistas, si no el pueblo cubano y no digo el mundo entero, porque el mundo es muy grande, pero casi el mundo entero, les tiene”, expresó López Gavilán.
A continuación, dio lectura a las resoluciones que amparan el otorgamiento de las medallas conmemorativas y se procedió a la entrega de las mismas a los homenajeados, los cuales posteriormente recibieron de manos de Miguel Barnet, presidente de la UNEAC y José Villa Soberón, vicepresidente primero, la Condición de Miembro Emérito de la organización de los artistas y escritores cubanos.
El maestro Chucho Valdés manifestó: “Quiero darle las gracias a la UNEAC, a Miguel Barnet a todos los que han tenido que ver con este acto; estoy muy agradecido por esta distinción que llevaremos siempre con mucho orgullo y que nos compromete a tratar de seguir haciendo lo mejor posible nuestro trabajo que es la música. Estoy muy contento de estar con Omara, que es una de mis cantantes favoritas de todos los tiempos, estoy muy agradecido, realmente esto es inolvidable”.
A continuación Miguel Barnet declaró: “Yo escuché hace años una frase de Roberto Fernández Retamar que a mí me estremeció, la quiero traer a colación porque hace apenas unos días conmemoramos el centenario de Ignacio Villa, ese grande, grande, amigo de todos nosotros y Retamar decía tenemos el privilegio de ser de la generación de Bola de Nieve, y nosotros tenemos el privilegio de ser de la generación de Omara Portuondo y de Chucho Valdés”.
La Diva del Buena Vista Social Club evocó al presidente fundador de la UNEAC, el Poeta Nacional, Nicolás Guillén.; y declaró sentirse orgullosa de haberlo conocido y más adelante aseguró “yo me siento muy feliz esta tarde de hoy, y no lo digo solo por el hecho de la distinción y la medalla, que es magnífico, pero estar aquí en este lugar , donde estuvo ese hombre maravilloso que fue Nicolás Guillén y todos nosotros hemos seguido el mismo sendero de él, lo hemos querido y lo seguimos queriendo, estamos haciendo lo mejor por nuestra patria, estamos haciendo lo mejor por nuestra cultura, eso merece todo este amor que se reúne en esta pequeña sala esta tarde, muchas gracias”, declaró esta mujer inmensa, perceptiblemente emocionada.
Estos artistas homenajeados no dejaron ni en un momento como éste de trabajar, Omara con su invulnerable voz y Chucho con sus manos asombrosas.
El maestro Guido López Gavilán, presidente de la Asociación de Música de la institución, dio la bienvenida a los asistentes a este acto solemne y explicó que se entregaría a ambos artistas además la Medalla 50 Aniversario, instituida para rendir merecido reconocimiento a los miembros fundadores de la organización que se han mantenido toda su vida con una actitud destacada en la formación del más valioso arte cubano.
“Creo que no hace falta, nadie me perdonaría que yo me pusiera a hablar acerca de la obra y de los méritos, lo que todo el mundo conoce, de Omara y Chucho, solamente quiero decirles que los premios mayores, que se pueden otorgar a los seres humanos, a los artistas, ellos los tienen, y ese máximo reconocimiento, es el cariño y el máximo galardón es la admiración que el pueblo cubano, no solo los músicos y los artistas, si no el pueblo cubano y no digo el mundo entero, porque el mundo es muy grande, pero casi el mundo entero, les tiene”, expresó López Gavilán.
A continuación, dio lectura a las resoluciones que amparan el otorgamiento de las medallas conmemorativas y se procedió a la entrega de las mismas a los homenajeados, los cuales posteriormente recibieron de manos de Miguel Barnet, presidente de la UNEAC y José Villa Soberón, vicepresidente primero, la Condición de Miembro Emérito de la organización de los artistas y escritores cubanos.
El maestro Chucho Valdés manifestó: “Quiero darle las gracias a la UNEAC, a Miguel Barnet a todos los que han tenido que ver con este acto; estoy muy agradecido por esta distinción que llevaremos siempre con mucho orgullo y que nos compromete a tratar de seguir haciendo lo mejor posible nuestro trabajo que es la música. Estoy muy contento de estar con Omara, que es una de mis cantantes favoritas de todos los tiempos, estoy muy agradecido, realmente esto es inolvidable”.
A continuación Miguel Barnet declaró: “Yo escuché hace años una frase de Roberto Fernández Retamar que a mí me estremeció, la quiero traer a colación porque hace apenas unos días conmemoramos el centenario de Ignacio Villa, ese grande, grande, amigo de todos nosotros y Retamar decía tenemos el privilegio de ser de la generación de Bola de Nieve, y nosotros tenemos el privilegio de ser de la generación de Omara Portuondo y de Chucho Valdés”.
La Diva del Buena Vista Social Club evocó al presidente fundador de la UNEAC, el Poeta Nacional, Nicolás Guillén.; y declaró sentirse orgullosa de haberlo conocido y más adelante aseguró “yo me siento muy feliz esta tarde de hoy, y no lo digo solo por el hecho de la distinción y la medalla, que es magnífico, pero estar aquí en este lugar , donde estuvo ese hombre maravilloso que fue Nicolás Guillén y todos nosotros hemos seguido el mismo sendero de él, lo hemos querido y lo seguimos queriendo, estamos haciendo lo mejor por nuestra patria, estamos haciendo lo mejor por nuestra cultura, eso merece todo este amor que se reúne en esta pequeña sala esta tarde, muchas gracias”, declaró esta mujer inmensa, perceptiblemente emocionada.
Estos artistas homenajeados no dejaron ni en un momento como éste de trabajar, Omara con su invulnerable voz y Chucho con sus manos asombrosas.
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