¿Quién de nosotros no ha cantado o tarareado, una y otra vez, La guantanamera de Joseíto Fernández, Mi gatico Vinagrito, de Teresita Fernández; Niñito cubano, de Dora Alonso; Cuba, qué linda es Cuba, de Eduardo Saborit, o Son los sueños todavía, de Gerardo Alfonso?
Las letras de decenas de canciones antológicas, aparecen en el tabloide Un cantar a mi Patria, obra conjunta de la Organización de Pioneros José Martí (OPJM), la Casa Editora Abril, de la Unión de Jóvenes Comunistas, y el Ministerio de Cultura.
Bellamente ilustrado, con este material se cumple uno de los acuerdos del V Congreso Pioneril, donde los delegados de todo el país, en representación de sus compañeros, pidieron la publicación de un cancionero con piezas tradicionales y patrióticas infantiles.
Un cantar a mi Patria representa una importante contribución, en este caso desde la lírica, la letra impresa, al conocimiento y disfrute por los cubanos más jóvenes de obras que no envejecen, clásicos del cancionero infantil y patriótico, que forman parte del patrimonio cultural de la nación, ha declarado Yamilé Ramos Cordero, presidenta de la OPJM.
A la Revolución, a los héroes, a la tierra en que nacimos, a la palma real, la bandera y esa mariposa que es la flor nacional, se canta en las 16 páginas del tabloide, igual que al amor, la paz, la esperanza, el porvenir, a ese enanito que repara sueños, a un barquito de papel y al maestro, precisó.
Las letras de decenas de canciones antológicas, aparecen en el tabloide Un cantar a mi Patria, obra conjunta de la Organización de Pioneros José Martí (OPJM), la Casa Editora Abril, de la Unión de Jóvenes Comunistas, y el Ministerio de Cultura.
Bellamente ilustrado, con este material se cumple uno de los acuerdos del V Congreso Pioneril, donde los delegados de todo el país, en representación de sus compañeros, pidieron la publicación de un cancionero con piezas tradicionales y patrióticas infantiles.
Un cantar a mi Patria representa una importante contribución, en este caso desde la lírica, la letra impresa, al conocimiento y disfrute por los cubanos más jóvenes de obras que no envejecen, clásicos del cancionero infantil y patriótico, que forman parte del patrimonio cultural de la nación, ha declarado Yamilé Ramos Cordero, presidenta de la OPJM.
A la Revolución, a los héroes, a la tierra en que nacimos, a la palma real, la bandera y esa mariposa que es la flor nacional, se canta en las 16 páginas del tabloide, igual que al amor, la paz, la esperanza, el porvenir, a ese enanito que repara sueños, a un barquito de papel y al maestro, precisó.
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