Waldo Mendoza al descubierto

suenacubano

Waldo Mendoza, la voz romántica de Cuba, responde con entusiasmo las interrogantes de su público, al cual agradeció el éxito de su carrera artística.

Una canción favorita…

La última que escribo.

¿A qué dedica el tiempo libre?

Disfruto compartir en casa con familiares, amigos y escribir en ese ambiente. A veces veo la televisión o juego con los niños, y de pronto se me ocurre una canción. Todo gira en torno a componer.

¿Recuerda un piropo que le hayan dedicado?

Qué gordito más sabroso.

Una frase que defina su filosofía de vida…

Vista larga y pasos cortos.

¿Cuál es el momento romántico perfecto?

Sucede cuando termino una canción romántica y la canto públicamente para que el público la disfrute. En ese entonces me siento realizado.

¿Cómo prefiere a las mujeres?

Mujeres.

¿Su esposa se pone celosa por las canciones que compone o están inspiradas en ella?

Están inspiradas en ella y a veces se pone celosa, las dos cosas. Si hago una canción que no tiene que ver con ella enseguida me pregunta a quién la dedico.

¿Cuándo joven también era bueno con los temas románticos o la musa vino con la experiencia?

Cuando joven era más bueno que ahora, aunque sigo siendo joven (risas), todavía no uso bastón. En mi época era diferente, ser romántico estaba de moda, yo siempre lo he sido.

Un concierto inolvidable

El primer concierto en el Teatro Mella en febrero 2011. Significó un antes y un después para mí.

El color que lo define…

El azul.

¿Cuáles es la mayor virtud y el peor defecto?

Aprecio la sencillez y la modestia de las personas; y no me gusta la arrogancia, la prepotencia ni la ignorancia.

¿Cuál es su comida preferida?

Me gusta mucho la sopa. También disfruto el lechón asado, el arroz congrí, la yuca con mojo, chicharrones.

¿Prefiere el campo o la ciudad?

Me crié en el monte desde que nací, es mi raíz, donde me siento mejor y más tranquilo. Incluso, actualmente vivo en el campo.

Su posesión más preciada

Mi casa y mi familia.