Santiago de Cuba.-La localidad de San Luis, a unos 30 kilómetros en el
norte de esta ciudad, alista sus galas para celebrar los días 25 y 26 de
mayo, un festejo netamente campesino: el 11. Festival A gozar en el platanal de Bartolo.
El célebre músico Electo Rosell Chepín compuso el tema A gozar en el platanal de Bartolo, inspirado en un sitio de Ciego de Ávila, casi en el centro del país, donde observó un sembradío de plátanos con un ranchón y un muñeco emplazado allí bajo el nombre de Bartolo.
Donde primero se cantó el número fue precisamente en San Luis, y lo hizo un famoso intérprete cubano, natural de esa localidad: Ibrahím Ferrer, con los años figura cumbre del Buena Vista Social Club.
Lo cierto es que la canción se convirtió en un emblema de la Orquesta de Chepín-Chovén y años más tarde, los sanluiseros tuvieron la iniciativa de organizar una fiesta de arte popular eminentemente campesino, con el nombre del título del son montuno A gozar en el platanal de Bartolo.
San Luis, conglomerado urbano de unos 35 000 habitantes y cabecera del municipio homónimo de más de 82 000 habitantes, consagra la celebración a las tradiciones campesinas y de la zona, y las dedica al Día del Campesino.
José Avich, director municipal de Cultura en San Luis explicó que como es usual en el campo, en la principal calle de la localidad, Martí, a lo largo de varias cuadras, ya se levantan bohíos (casa típica campesina de tablas de Palma Real y cubierta de guano o yagua), que servirán como escenario a la auténtica fiesta campestre.
El directivo señaló entre otras tradiciones que matizarán el festejo, asar puercos en púa, la venta de café, con todos sus atributos, incluido pulverizar en el pilón de madera, el grano previamente tostado; barrer con escoba de palmiche; competencia de llenar un recipiente con agua cargada en cubo; la monta del caballito, acompañada esta acción por un conjunto musical campesino; y lo más llamativo: el segmento culinario del evento.
Por lo tanto, en la populosa calle Martí de San Luis, estará presente en A gozar en el platanal de Bartolo, la cocina criolla del campo: todo tipo de fricasé de chivo, ovejo..., también, la competencia del maíz en todas sus manifestaciones: rositas de maíz, hayaca, maíz asado, fritura de maíz, arroz con maíz, y el que come más hayaca. Al respecto hay records populares de fiestas anteriores: un individuo consumió de una sentada, 13 hayacas; otro, confeccionó una hayaca de ¡45 libras!.
Al mismo tiempo, la Dirección de Deportes se inserta en el festival, con diversos juegos: subir el palo ensebado, gran partida masiva de dominó... Para los triunfadores en todas las competencias, los premios consisten en productos del agro.
"Pero lo más importante es la colaboración, la participación del pueblo. Esta es una celebración en la que todo el protagonismo lo tiene la población, los campesinos, las Cooperativas de Crédito y Servicio, las Cooperativas de Producción Agrícola... Todo se inicia con un gran desfile popular, y a lo largo de la fiesta hay una sola orquesta invitada, la "Chepín-Chovén", porque el resto de la música se hace con grupos de pequeño formato del Movimiento de Artistas Aficionados", señaló Avich.
Los sanluiseros a modo de tótem han construido un enorme tres (tipo de guitarra con tres pares de cuerdas) de unos 10 metros, hecho con yagua, que presidirá la competencia de treseros.
El pasado 6 de mayo, a unos 10 kilómetros de San Luis, en el batey del ingenio azucarero Chile, antiguo Santa Ana de Auza, se efectuó el festival El trinar de mi tierra, promovido por la Casa de Cultura Félix B. Caignet, en el que participaron repentistas y agrupaciones musicales todas de corte campesino, con un ganador: el Septeto Romance, de Dos Caminos de San Luis. Esa festividad es el preámbulo del ¡A gozar en el platanal de Bartolo!.
El célebre músico Electo Rosell Chepín compuso el tema A gozar en el platanal de Bartolo, inspirado en un sitio de Ciego de Ávila, casi en el centro del país, donde observó un sembradío de plátanos con un ranchón y un muñeco emplazado allí bajo el nombre de Bartolo.
Donde primero se cantó el número fue precisamente en San Luis, y lo hizo un famoso intérprete cubano, natural de esa localidad: Ibrahím Ferrer, con los años figura cumbre del Buena Vista Social Club.
Lo cierto es que la canción se convirtió en un emblema de la Orquesta de Chepín-Chovén y años más tarde, los sanluiseros tuvieron la iniciativa de organizar una fiesta de arte popular eminentemente campesino, con el nombre del título del son montuno A gozar en el platanal de Bartolo.
San Luis, conglomerado urbano de unos 35 000 habitantes y cabecera del municipio homónimo de más de 82 000 habitantes, consagra la celebración a las tradiciones campesinas y de la zona, y las dedica al Día del Campesino.
José Avich, director municipal de Cultura en San Luis explicó que como es usual en el campo, en la principal calle de la localidad, Martí, a lo largo de varias cuadras, ya se levantan bohíos (casa típica campesina de tablas de Palma Real y cubierta de guano o yagua), que servirán como escenario a la auténtica fiesta campestre.
El directivo señaló entre otras tradiciones que matizarán el festejo, asar puercos en púa, la venta de café, con todos sus atributos, incluido pulverizar en el pilón de madera, el grano previamente tostado; barrer con escoba de palmiche; competencia de llenar un recipiente con agua cargada en cubo; la monta del caballito, acompañada esta acción por un conjunto musical campesino; y lo más llamativo: el segmento culinario del evento.
Por lo tanto, en la populosa calle Martí de San Luis, estará presente en A gozar en el platanal de Bartolo, la cocina criolla del campo: todo tipo de fricasé de chivo, ovejo..., también, la competencia del maíz en todas sus manifestaciones: rositas de maíz, hayaca, maíz asado, fritura de maíz, arroz con maíz, y el que come más hayaca. Al respecto hay records populares de fiestas anteriores: un individuo consumió de una sentada, 13 hayacas; otro, confeccionó una hayaca de ¡45 libras!.
Al mismo tiempo, la Dirección de Deportes se inserta en el festival, con diversos juegos: subir el palo ensebado, gran partida masiva de dominó... Para los triunfadores en todas las competencias, los premios consisten en productos del agro.
"Pero lo más importante es la colaboración, la participación del pueblo. Esta es una celebración en la que todo el protagonismo lo tiene la población, los campesinos, las Cooperativas de Crédito y Servicio, las Cooperativas de Producción Agrícola... Todo se inicia con un gran desfile popular, y a lo largo de la fiesta hay una sola orquesta invitada, la "Chepín-Chovén", porque el resto de la música se hace con grupos de pequeño formato del Movimiento de Artistas Aficionados", señaló Avich.
Los sanluiseros a modo de tótem han construido un enorme tres (tipo de guitarra con tres pares de cuerdas) de unos 10 metros, hecho con yagua, que presidirá la competencia de treseros.
El pasado 6 de mayo, a unos 10 kilómetros de San Luis, en el batey del ingenio azucarero Chile, antiguo Santa Ana de Auza, se efectuó el festival El trinar de mi tierra, promovido por la Casa de Cultura Félix B. Caignet, en el que participaron repentistas y agrupaciones musicales todas de corte campesino, con un ganador: el Septeto Romance, de Dos Caminos de San Luis. Esa festividad es el preámbulo del ¡A gozar en el platanal de Bartolo!.
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